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La huella hídrica: qué es y cómo calcularla


Para fabricar unos vaqueros desgastados se pueden llegar a necesitar unos 3.000 litros de agua y para cultivar un aguacate alrededor de 78. Y es que, tal y como nos decían nuestros padres cuando éramos pequeños, todos nuestros actos tienen consecuencias, tanto positivas como negativas.  En referencia al agua, todo lo que consumimos o utilizamos en nuestro día a día tiene un impacto. Una repercusión que medimos a través de un indicador ambiental: la huella hídrica. 

Si quieres conocer más sobre la importancia de la huella hídrica, en Tuawa te contamos todo sobre ella. ¡Comenzamos!

agua en el océano

¿Qué es la huella hídrica?

Si tuviéramos que hacer una definición simple y directa sobre lo que es la huella hídrica, te diríamos que consiste en un indicador compuesto por diferentes elementos y que trata de medir el volumen de agua que se utiliza de forma diaria, tanto durante los procesos de producción y fabricación como en el consumo de productos o servicios. 

Lo podemos comparar con el término de Huella de Carbono, otro marcador de la sostenibilidad y con el que, además, comparten una misma finalidad: buscar una gestión más eficiente de los recursos. En el caso de la huella hídrica, de un bien limitado y necesario para nuestra supervivencia como es el agua dulce. 

Saber el índice de consumo de agua dulce, tanto de forma individual como de un colectivo o empresa, nos permite tomar medidas que optimicen recursos y/o reduzca el consumo. ¿Resultado? Un menor impacto medioambiental.

Cómo calcular tu huella hídrica

¿Sabemos realmente cuál es nuestro consumo de agua diario? Según los datos de la UNESCO, la huella hídrica anual media de una persona es de 1.385 m3. Esta es la cantidad equivalente a un consumo convencional, pero ¿cómo se mide? 

La huella hídrica se mide en unidades de volumen (litros o metros cúbicos) por cada uno de los productos que se han fabricado o los servicios y productos que han sido consumidos. 

Haciendo estas mediciones se obtiene la cantidad de agua que utilizamos como individuos, empresas o, en conjunto, como país. Para ello se tiene en cuenta todas las etapas de fabricación de un producto hasta que es consumido. Por ejemplo, para medir la huella hídrica de una manzana, se tendría en cuenta la cantidad de agua de riego, abonos y transporte hasta llegar al consumidor final. 

Aunque parezca sencillo, se trata de un cálculo algo complejo, pues tiene en cuenta diferentes variables. Por ejemplo, dependiendo de los niveles de producción de un país, uno puede tener una huella hídrica mayor que otra o, por el contrario, dependiendo de los niveles de sostenibilidad dentro de los procesos productivos, esta huella puede ser incluso menor. 

Lo que sí que te podemos contar es que el indicador de la huella hídrica se basa en la procedencia del agua que se consume y se distribuye en tres elementos que se clasifican en tres colores: 

  • Huella hídrica verde: es agua procedente de las precipitaciones, tanto lluvia como nieve y que, además, queda almacenada en la tierra. Mayoritariamente, esta agua es la que se encuentra en productos forestales, agrícolas y hortícolas. 
  • Huella hídrica azul: corresponde al agua procedente de ríos, lagos y acuíferos, además de proceder de recursos superficiales como subterráneos. Principalmente, se relaciona con el consumo por parte de los procesos de fabricación. 
  • Huella hídrica gris: como se puede entender por el color elegido, es aquella que se relaciona con la calidad del agua, normalmente contaminada como resultado de algunos procesos.

Además de ello, se tienen en cuenta otras dimensiones como el consumo directo o indirecto o la dimensión temporal. Unos factores que, junto a los anteriores, formarían la huella hídrica final. 

agua en el hogar

La huella hídrica de la mañana de una persona

No tenemos acceso directo a todas las dimensiones del impacto de nuestro consumo hídrico, pero sí que podemos acceder a algunos datos sobre la cantidad de agua que se destinan a ciertos elementos, así que… ¿Por qué no calcular la huella hídrica que puede tener una persona durante unas horas de una mañana cualquiera?  

Suena la alarma, te calzas las zapatillas y directo a la ducha: 

  • Una ducha de cinco minutos equivale a 45 litros de agua

Es la hora de prepararse el desayuno, pongamos algo sencillo: 

  • Un café con leche: 50 litros de agua. 
  • Una rebanada de pan: 160 litros.
  • Un aguacate: 78 litros de agua.
  • Una naranja: 50 litros.

Ahora es momento de vestirse, aunque esto no cuenta como un gasto diario, veamos la huella hídrica de algunas prendas de nuestro armario: 

  • Unos vaqueros requieren de alrededor de 8.000 litros, si hacemos una media de uso, equivaldría a unos 22 litros de agua.
  • Una camiseta básica son unos 2.700 litros de agua, lo que supone un consumo diario de 7,39 litros durante un año 
  • Unas deportivas: 4.400 litros entre un año de uso equivale a 12 litros de agua diarios. 

Una vez listos, cogemos camino al trabajo y nos compramos una botella de agua desechable:

  • Vehículo particular: teniendo en cuenta una vida útil de 10 años y con un uso diario, equivaldría a 110 litros de agua diarios (sin contar la gasolina).
  • Botella de agua desechable son 7,5 litros. 

En estas dos horas, nuestra huella hídrica ha alcanzado un total de 496,89 litros de agua. ¿Te imaginas lo que supone al final del día? ¡Alrededor de 3.750 litros de agua!

vaso de agua hídrica

El cambio climático y el agua

Seguramente te hayas dado cuenta de que consumimos mucha más agua de la que imaginabas. Un recurso tan escaso que está sufriendo las atrocidades del cambio climático. 

El agua dulce aporta muchos beneficios para que el organismo funcione correctamente, al igual que el de los animales y las plantas. Al fin y al cabo, nuestro planeta Tierra está formado por un 70% de agua. 

Para ayudar a frenar el cambio climático y ser más sostenibles, conocer nuestra huella hídrica puede ser un punto de inflexión para comenzar a tomar algunas medidas. ¿Quieres saber algunas de ellas? 

  • Opta por alimentos de temporada y de producción local: con ello reducimos el consumo de agua para su producción y acortamos el trayecto de su transporte. 
  • Mira bien las etiquetas de la ropa que compras: la fabricación de ropa es una de las acciones que mayor consumo de agua requiere. Opta por aquellos que reutilizan materiales o que incluyen sellos de sostenibilidad. 
  • Consumo de agua: fabricar una botella de agua desechable conlleva un consumo medio de 4 litros de agua, a ello hay que añadir otros factores como el transporte. Opta por incorporar filtros de agua en casa. Una forma sostenible y mucho más económica de tener siempre agua en casa sin tener que recurrir al agua embotellada. 

Con el consumo de agua filtrada junto al uso de botellas reutilizables, podríamos llegar a reducir el consumo de 2.000 botellas de plástico anuales. ¿Qué supone esto? Además de una reducción considerable de materiales plásticos, una bajada de nuestra huella hídrica en 8.000 litros de agua. En nuestro artículo Agua filtrada, una alternativa sostenible para reducir tu huella hídrica, te contamos al detalle la importancia, e impacto, de hacer un pequeño cambio. 

Si te ha entrado la curiosidad por saber los litros de agua que ahorrarías utilizando nuestros filtros de agua en tu hogar, en Tuawa hemo creado una calculadora, para que te sorprendas con la cantidad de agua que puedes llegar a ahorrar.

Reflexionemos y optemos siempre por las opciones que menor impacto tienen sobre nuestro planeta. Ya sea desde la elección de una fruta hasta la compra de un vehículo. ¡Todo cuenta, seamos más amigables con el medioambiente!

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