Si lees contaminación ¿qué imagen te viene a la cabeza? A nosotros mares de plásticos, cielos cubiertos por nubes grises o ríos y mares devastados por residuos y contaminantes.
Sentimos decirte que puede que desde casa estés contribuyendo a esa contaminación del agua, por ejemplo, con un acto tan cotidiano como poner una lavadora. ¿Sabes por qué? Los jabones y detergentes son la respuesta.
El jabón, presente con nosotros desde hace miles de años, se ha convertido en una amenaza para la sostenibilidad. Hemos pasado de usar productos naturales a productos sintéticos, una de las principales razones de la contaminación del agua por detergentes.
El principal objetivo de Tuawa es el cuidado del medioambiente a través de nuestra solución de agua filtrada. La contaminación del agua nos concierne directamente y por ello, queremos contarte cómo puedes reducir tu impacto ambiental cada vez que pongas una lavadora. ¡Empezamos!
Cómo contaminan el agua los detergentes
Se cree que el jabón se inventó hace más de 4.000 años, y estaba compuesto por productos naturales como aceites y plantas aromáticas. Con el paso del tiempo, la naturalidad de su composición fue desapareciendo. Las industrias comenzaron a comercializar detergentes con una proporción menor de ingredientes naturales y mayor proporción de químicos. Un cambio que abarata costes pero repercute directamente en la crisis climática.
La mayoría de detergentes que encontramos en el mercado son no biodegradables. Estos productos son conocidos como detergentes duros, lo que hace referencia a su composición y biodegradabilidad: productos producidos sintéticamente que provocan una contaminación persistente en las aguas, ya que esta no desaparece. En el lado opuesto, encontramos los detergentes blandos, que son aquellos que son biodegradables.
Impacto de los detergentes duros sobre el agua
Los detergentes duros tienen una composición química a base de fosfatos, cloruros o antibacterianos, y generan efectos nocivos sobre la salud de las personas y del medio ambiente.
Se trata de un producto que utilizamos en nuestro día a día y tiene una gran relevancia en la contaminación del agua. No solo por el uso del detergente en sí, sino también por el recipiente en el que viene envasado, plástico, un material que puede llegar a tardar 1.000 años en degradarse.
Pero, ¿sabes qué impacto tienen los detergentes en el agua? Te adelantamos que pueden producir cambios físicos, químicos y biológicos.
La extensa variedad de detergentes que existen en el mercado utilizan compuestos como el cloro, los fosfatos o los antibacteriales para luchar contra la dureza del agua y eliminar la suciedad de la superficie de nuestras prendas. Al ser arrojados a lagos y ríos a través de las aguas residuales, estos químicos crean desequilibrios en el crecimiento de las plantas y algas del ecosistema acuático y aceleran el proceso de eutrofización.
Este proceso impide la fotosíntesis a los vegetales acuáticos y provoca la disminución de oxígeno en el agua, y con ello, la muerte de la flora y faunas acuáticas. A esto se suma la muerte de la vida bacteriana acuática, que logra equilibrar la flora y fauna de los lagos, ríos y mares.
Soluciones para paliar la contaminación del agua
Para proteger la calidad de nuestras aguas y reducir su contaminación, se han tomado algunas iniciativas. Por ejemplo, algunos países han prohibido el uso de detergentes cuya composición incluya fosfatos entre sus ingredientes.
Detergentes naturales
Existen alternativas mucho más sostenibles para el medio ambiente y que no provocan una contaminación permanente del agua, como los detergentes duros. Es el caso de los detergentes blandos, una solución a la contaminación del agua, siempre y cuando sean de origen natural o vegetal y se consideren biodegradables.
Algunos de estos detergentes se puede encontrar en grandes superficies o en tiendas de especialización como herbolarios o tiendas a granel. Otra opción es hacer tu propio detergente a base de productos naturales.
Limpieza con ozono
¿Te imaginas poder limpiar tu ropa sin necesidad de usar detergente? Sí, solamente con agua. En la búsqueda de alternativas a los detergentes que logren no tener un impacto negativo en el medio ambiente, ha aparecido un nuevo sistema de limpieza: la limpieza con ozono.
Este nuevo formato de limpieza se basa en agua tratada con un sistema de ozono, una opción que supone un gran avance para la naturaleza. Es capaz de limpiar nuestra ropa y eliminar las bacterias de ella, sin necesidad de usar detergentes y evitando que los residuos que desprenden se queden en el tejido de nuestras prendas.
Cuidar el agua y la naturaleza es cosa de todos, por lo que comenzar a utilizar alternativas menos contaminantes es un gran paso para ayudar a frenar y reducir la crisis climática. Optemos por un consumo más responsable y consciente ¡Ayudemos al planeta juntos!